1 facha menos
Nunca me he alegrado de la muerte de nadie, debe ser cosa de la educación catódica, pero ayer me alegré de la del nazi este austríaco que se hostió con el coche.
Pati me miró fatal cuando comentaban la noticia. Me salió natural, no lo pude evitar. Siempre me quedaba con la cara torcida cuando me contaban la historia de la gente que había brindado con champagne el día que murió Paquito, pero ahora les comprendo. Hay que joderse?
Y mientras tanto, la cara de Rajoy mirando el desfile, no tiene precio. Para todo lo demás, mastercá